Las aulas universitarias de la carrera de Derecho se convierten en el caldo de cultivo más habitual para los futuros gobernantes españoles. Así lo demuestran la mayoría de los diplomas de los cinco presidentes que han gobernado la España democrática: Adolfo Suárez, Leopoldo Calvo Sotelo, Felipe González, José María Aznar y Jose Luis Rodríguez Zapatero.
El proceso de la transición española constituye uno de los ejemplos más estudiados en todo el mundo de tránsito de una dictadura a una monarquía parlamentaria. Si se trata de ponerle rostro a esos años, Adolfo Suárez se convierte en uno de los protagonistas desde el 15 de junio de 1977, fecha que pasa a la historia por ser el día en el que España celebra las primeras elecciones generales libres desde el año 1936.
Los ciudadanos otorgan su confianza a Adolfo Suárez, un licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid que veinte años más tarde recibiría el premio Príncipe de Asturias de la Concordia por su “ejemplar comportamiento político en la fundación de nuestra democracia”. Su protagonismo en política estuvo ligado a la época dorada de la Unión del Centro Democrático (UCD), aunque son las críticas a su gestión la causa principal que provoca su dimisión, el 29 de enero de 1981.
¿Qué estudiar para ser Presidente?
Ministro de Comercio durante el primer gobierno de la Monarquía, entre diciembre de 1975 y julio de 1976, durante los gobiernos de Suárez, Leopoldo Calvo Sotelo, ocupó los cargos de ministro de Obras Públicas, ministro para las Relaciones con la Comunidad Europea y vicepresidente segundo encargado de Asuntos Económicos. Tras la dimisión de Suárez, fue investido presidente del Gobierno el 25 de febrero de 1981. Antes de su trayectoria política, Calvo Sotelo pasó por las aulas de la Universidad de Salamanca donde terminó y se doctoró en ingeniería de Caminos. El ejemplo de Calvo Sotelo constituye una de las excepciones del perfil típico de un presidente del Gobierno español. Quien sí proviene también de las aulas de Derecho es Felipe González, quien se licenció en esta especialidad tras su paso por la Universidad de Sevilla. Siendo abogado laboralista en esta ciudad, entró a formar parte del Partido Socialista en el año 1963, aun en clandestinidad.
Tras dos legislaturas, el nombre de José María Aznar ocupó el cargo del presidente del Gobierno, esta vez por parte del Partido Popular. Tras su militancia juvenil en el Frente de Estudiantes Sindicalistas, se licenció en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid en el año 1975 y llegó a trabajar en Hacienda como Inspector de Finanzas del Estado. En el año 2004, era otro socialista, en esta ocasión, Jose Luis Rodriguez Zapatero quien ocupó su plaza en el Palacio de la Moncloa.
Zapatero constituye el último ejemplo de estudiantes de Derecho que han llegado a convertirse en presidentes del gobierno. Rodríguez Zapatero creció en León y estudió Primaria en el Colegio Discípulas de Jesús de León y Bachillerato y COU en el colegio privado Colegio Leonés. El 15 de agosto de 1976, cuando los partidos políticos aún no eran legales, asistió a un mitin de Felipe González en Gijón, allí nació su vocación política, su militancia socialista y su admiración por el líder sevillano. Se afilió a las Juventudes Socialistas en 1979 al poco de cumplir la mayoría de edad y fue secretario de la organización en León.
Estudió Derecho en la Universidad de León, donde conoció a Sonsoles Espinosa, con la que más tarde contraería matrimonio. Zapatero obtuvo la licenciatura en 1982, con una tesina sobre el Estatuto de Autonomía de Castilla y León. Después de licenciarse, Zapatero fue contratado como profesor ayudante de Derecho Constitucional en la misma Universidad.
Los más curiosos
No todos los políticos españoles han cursado estudios de Derecho, aunque parezca lo contrario. Algunos de nuestros representantes públicos más destacados tienen una formación superior más especial, curiosa, diferente o, al menos, que no concuerda mucho con los cargos públicos que ostentan a lo largo de sus carreras. El incansable Alfonso Guerra se licenció en Filosofía y Letras y también en Ingeniería Técnico Industrial, que parece que no tienen mucho que ver una con la otra; eso sí, tiene conocimientos tanto de letras como de ciencias, no se puede dudar.
Inés Sabanés, candidata en las últimas elecciones municipales a la presidencia de la Comunidad de Madrid encabezando la lista de Izquierda Unida, es Licenciada en Educación Física y no es la única con una titulación que se sale de lo normal. El político vasco Iñaki Anasagasti es otro ejemplo de esta circunstancia, estudió Comunicación Social en la Universidad Católica Andrés Bello de Caracas (Venezuela). Además de ser periodista, ha cursado estudios de Economía y Estudios Internacionales.
Algunos de los representantes mediáticos más controvertidos destacan por sus titulaciones. Josep Lluis Carod Rovira se licenció en Filología Catalana por la Universidad de Barcelona y el actual presidente del PNV Iñigo Urkullu, hizo lo propio con una Diplomatura en Magisterio con la especialidad en Filología vasca.
Aunque el ejemplo más llamativo de los políticos que actualmente están en activo es el de la cabeza de lista por el Partido Popular en el País Vasco, María San Gil. La presidenta del PP vasco se licenció en la especialidad de Filología Bíblica Trilingüe, que estudiaba las lenguas hebreas, latina y griega. Estos originales estudios se ofrecían en la Universidad Pontificia de Salamanca, aunque ya hace unos años que desaparecieron del panorama educativo español.